Introducción

En los últimos años, el bienestar animal ha pasado de ser una preocupación marginal a convertirse en un pilar fundamental de la ganadería moderna. Este cambio de paradigma no solo responde a una creciente conciencia ética en la sociedad, sino que también se ha demostrado como un factor clave para la sostenibilidad y la productividad del sector ganadero.

En este artículo, exploraremos en profundidad las nuevas normas de bienestar animal, su importancia crucial y las estrategias para garantizar la salud y a lo que el bienestar  animal se refiere, incluyendo la prevención de enfermedades y la reducción del uso de antibióticos.

Las Nuevas Normas de Bienestar Animal en Ganadería

El marco legislativo europeo ha sido pionero en establecer normas de bienestar animal.

La nueva «Estrategia de la Granja a la Mesa» de la Unión Europea incluye objetivos ambiciosos para mejorar el bienestar animal. Esta estrategia contempla una revisión exhaustiva de la legislación sobre bienestar animal, abarcando aspectos como el transporte y el sacrificio. Además, se están considerando opciones para implementar un sistema de etiquetado sobre bienestar animal, lo que permitiría a los consumidores tomar decisiones más informadas.

En España, como miembro de la UE, se está adaptando la legislación nacional a estas nuevas exigencias. Un ejemplo claro es el Real Decreto 637/2021 sobre normas básicas de ordenación de las granjas avícolas. Este decreto establece requisitos más estrictos en cuanto a espacio suficiente, iluminación y enriquecimiento ambiental para las aves de corral. Asimismo, se están desarrollando normativas similares para otros sectores como el bovino, porcino, ovino y caprino.

Las nuevas normas se centran en varios aspectos clave. En primer lugar, se establece un espacio mínimo para los animales que viven en explotaciones ganaderas, que varía según la especie y el sistema de producción.

Este requisito busca garantizar que los animales puedan moverse libremente y expresar sus comportamientos naturales.

En segundo lugar, se hace hincapié en el enriquecimiento ambiental, proporcionando a los animales estímulos que mejoren su bienestar a nivel físico y mental. Esto puede incluir la provisión de materiales para hozar en el caso de los cerdos, o perchas y baños de arena para las gallinas.

Otro aspecto importante es la reducción de prácticas dolorosas. Se están implementando medidas para minimizar o eliminar procedimientos como el corte de colas en cerdos o el despique en aves, buscando alternativas menos invasivas o mejorando las condiciones que hacen necesarias estas prácticas.

Además, se están mejorando las condiciones de transporte y sacrificio, con normas más estrictas sobre tiempos de viaje, densidades de carga y métodos de aturdimiento.

Un elemento crucial de las nuevas normativas es la formación obligatoria en bienestar animal para ganaderos y operarios. Esta formación busca asegurar que todas las personas involucradas en el cuidado de los animales tengan los conocimientos necesarios para garantizar su bienestar.

La Importancia del Bienestar Animal en la Ganadería

El bienestar animal no es solo una cuestión ética, sino que tiene implicaciones significativas en varios aspectos de la producción ganadera.

Desde un punto de vista ético y de responsabilidad social, el trato digno a los animales se ha convertido en una demanda creciente de la sociedad. Los consumidores son cada vez más conscientes y exigen productos de origen animal obtenidos de manera ética y sostenible.

Pero más allá de la ética, el bienestar animal tiene un impacto directo para mejorar la calidad y seguridad alimentaria.

Numerosos estudios científicos han demostrado que los animales con mejor bienestar producen alimentos de mayor calidad. 

Por ejemplo, el ganado bovino que ha sido criado en condiciones de bajo estrés tiende a producir carne con menos estrés oxidativo, lo que se traduce en una mejor textura y sabor. En el caso de las vacas lecheras, un mejor bienestar se asocia con una producción de leche de mejor calidad nutricional.

Desde una perspectiva económica, aunque la implementación de medidas de bienestar animal puede requerir inversiones iniciales, a largo plazo resulta económicamente beneficioso.

Los animales con mejor bienestar suelen ser más productivos, tienen una menor tasa de mortalidad y requieren menos intervenciones veterinarias.

 Además, los productos provenientes de sistemas que garantizan un alto nivel de bienestar animal pueden acceder a mercados premium, donde los consumidores están dispuestos a pagar un sobreprecio por estas características.

El bienestar animal también está estrechamente ligado a la sostenibilidad ambiental. Los animales más sanos y con mejor bienestar requieren menos recursos para producir la misma cantidad de alimento. Esto se traduce en una reducción de la huella de carbono por unidad de producto. Además, estos animales suelen tener una mejor eficiencia de conversión alimenticia, lo que significa que necesitan menos alimento para producir carne, leche o huevos.

Salud Animal: Pilar Fundamental del Bienestar

La salud animal es un componente esencial del bienestar, y en la ganadería moderna se está adoptando cada vez más un enfoque preventivo.

Este enfoque se basa en la premisa de que es mejor prevenir las enfermedades que tratarlas una vez que aparecen. Para ello, AMBiotec implementa programas personalizados, que se adaptan a las necesidades específicas de cada granja y región.

El monitoreo constante de indicadores de salud es otra práctica crucial. Esto implica la observación regular de los animales, la realización de pruebas de laboratorio y el uso de tecnologías de seguimiento para detectar cambios en el comportamiento o la fisiología que puedan indicar problemas de salud incipientes.

La bioseguridad se ha convertido en un aspecto fundamental de la salud animal. Esto implica la implementación de medidas rigurosas para prevenir la entrada y propagación de enfermedades en la granja. Estas medidas pueden incluir el control de acceso a las instalaciones, la desinfección de vehículos y equipos, y protocolos estrictos para el manejo de animales nuevos o enfermos.

La nutrición adecuada es otro pilar de la salud animal. Las dietas se formulan cuidadosamente para adaptarse a cada etapa productiva del animal, asegurando que reciban todos los nutrientes necesarios para mantener una salud óptima.

En esta línea, se está prestando cada vez más atención a la suplementación con probióticos y fitobióticos, que pueden mejorar la salud intestinal y fortalecer el sistema inmune. En este punto AMBiotec cuenta con una excelente gama de productos y fórmulas nutricionales que garantizan la salud y el bienestar animal, obteniendo excelentes rendimientos en la explotación ganadera.

El manejo del estrés es un aspecto crucial para mantener un sistema inmune fuerte. Esto implica diseñar instalaciones que permitan a los animales expresar sus comportamientos naturales, implementar técnicas de manejo que minimicen el estrés durante procedimientos necesarios como la vacunación o el transporte, y proporcionar enriquecimiento ambiental para estimular mental y físicamente a los animales.

Prevención: La Mejor Medicina

En el contexto del bienestar animal, la prevención se ha convertido en la piedra angular de la salud animal. La bioseguridad avanzada es la primera línea de defensa contra las enfermedades. Esto implica la implementación de protocolos sanitarios estrictos de entrada y salida de la granja, incluyendo el uso de ropa y calzado específicos, duchas de entrada y salida en algunos casos, y la limitación del acceso a personal esencial.

La cuarentena para animales nuevos es otra práctica crucial. Los animales que se introducen en una granja pueden ser portadores de enfermedades, por lo que se mantienen aislados durante un período determinado y se someten a pruebas antes de incorporarse al rebaño principal. Así mismo, la limpieza y desinfección regular de las instalaciones es fundamental para mantener un ambiente saludable.

La genética y la selección están jugando un papel cada vez más importante en la prevención de enfermedades. Los programas de mejora genética ahora no solo se centran en características productivas, sino también en la resistencia a enfermedades y la rusticidad. Se están utilizando marcadores genéticos para identificar animales con mayor resistencia natural a ciertas enfermedades, y estos rasgos se están incorporando en los programas de cría.

La tecnología está ofreciendo nuevas herramientas para la prevención de enfermedades. Los sistemas de monitoreo en tiempo real pueden detectar cambios sutiles en los parámetros fisiológicos de los animales, permitiendo una intervención temprana antes de que se desarrollen problemas graves. La inteligencia artificial se está utilizando para analizar grandes cantidades de datos y predecir brotes de enfermedades, permitiendo a los ganaderos tomar medidas preventivas.

Reducción del Uso de Antibióticos: Un Desafío Necesario

El uso excesivo de antibióticos en la ganadería ha sido identificado como un factor contribuyente a la resistencia antimicrobiana, una amenaza global para la salud humana y animal. En respuesta a esto, el sector ganadero está implementando estrategias para reducir el uso de antibióticos sin comprometer la salud animal.

Una de las estrategias clave es el uso responsable y selectivo de antibióticos. Esto implica utilizar estos medicamentos solo cuando son realmente necesarios, basándose en diagnósticos precisos y siguiendo las pautas de dosificación adecuadas. Además, se está poniendo énfasis en el uso de antibióticos de espectro estrecho cuando es posible, en lugar de antibióticos de amplio espectro.

La implementación de tratamientos alternativos es otra área de enfoque. Esto incluye el uso de fitobióticos y aceites esenciales, que han demostrado tener propiedades antimicrobianas y pueden ayudar a mantener la salud intestinal. Los ácidos orgánicos también se están utilizando como alternativa, ya que pueden crear un ambiente hostil para los patógenos en el tracto digestivo.

Los inmunoestimulantes naturales son otra alternativa prometedora. Estos compuestos pueden fortalecer el sistema inmune de los animales, haciéndolos más resistentes a las enfermedades y reduciendo la necesidad de tratamientos antibióticos.

La mejora en las técnicas de diagnóstico también está contribuyendo a la reducción del uso de antibióticos. Las pruebas rápidas y precisas permiten identificar el agente causante de una enfermedad, evitando el uso de antibióticos en casos donde no son efectivos, como en las infecciones virales.

Los resultados de estas estrategias de reducción de antibióticos son alentadores. Se ha observado una disminución en los residuos de antibióticos en los productos animales, lo que es beneficioso tanto para la salud humana como para el acceso a mercados que tienen restricciones estrictas sobre estos residuos. Además, al reducir el uso de antibióticos, se disminuye el riesgo de desarrollo de resistencias, preservando la eficacia de estos medicamentos cruciales para futuras generaciones.

Implementación Práctica del Bienestar Animal

La implementación práctica del bienestar animal requiere un enfoque holístico que abarca varios aspectos de la producción ganadera. Un elemento crucial es la evaluación del bienestar. Es necesario establecer sistemas de evaluación objetivos que permitan medir y monitorear el bienestar de los animales de forma continua.

Uno de los sistemas más utilizados es el protocolo Welfare Quality, desarrollado por un consorcio de investigadores europeos. Este protocolo evalúa el bienestar animal basándose en cuatro principios: buena alimentación, agua limpia, buen alojamiento, buena salud y comportamiento apropiado. Cada uno de estos principios se evalúa mediante una serie de criterios e indicadores basados en el animal, como su comportamiento, salud y productividad.

La formación continua del personal es fundamental para garantizar el bienestar animal. Todos los trabajadores involucrados en el cuidado de los animales deben recibir formación adecuada sobre las necesidades de los animales, cómo reconocer signos de enfermedad o estrés, y cómo manejar a los animales de manera que se minimice el estrés. Esta formación debe actualizarse regularmente para incorporar nuevos conocimientos y prácticas.

El diseño de las instalaciones juega un papel crucial en el bienestar animal. Las instalaciones deben proporcionar un ambiente cómodo y seguro que permita a los animales expresar sus comportamientos naturales. Esto puede incluir la provisión de áreas de descanso adecuadas, sistemas de ventilación eficientes para mantener una calidad del aire óptima, y espacios que permitan la interacción social en especies gregarias.

El manejo de bajo estrés es otra práctica importante. Esto implica utilizar técnicas que minimicen el miedo y la ansiedad en los animales durante procedimientos rutinarios como el movimiento entre corrales o durante los tratamientos veterinarios. Por ejemplo, en el ganado bovino, se utiliza el principio de la «zona de fuga» para mover a los animales de manera eficiente y sin estrés.

El Futuro del Bienestar Animal en Ganadería

El futuro del bienestar animal en la ganadería se perfila como un campo de constante evolución e innovación. Una de las tendencias emergentes es la ganadería de precisión y prevención, que utiliza tecnologías avanzadas para monitorear y manejar a los animales de forma individual. Esto incluye el uso de sensores y dispositivos de seguimiento que pueden proporcionar información en tiempo real sobre la salud, el comportamiento y el bienestar de cada animal así como programas basado en productos naturales para mejorar el sistema inmune de los animales.

Los sistemas de producción regenerativos están ganando atención como una forma de integrar la producción animal con la salud del ecosistema. Estos sistemas buscan imitar los procesos naturales, permitiendo que los animales cumplan roles ecológicos beneficiosos, como la mejora de la salud del suelo a través del pastoreo rotacional.

La integración de conceptos de etología, el estudio del comportamiento animal, en el diseño de sistemas productivos es otra tendencia importante. Este enfoque busca crear ambientes que permitan a los animales expresar sus comportamientos naturales, lo que se traduce en un mejor bienestar y, a menudo, en una mayor productividad.

Sin embargo, el camino hacia un mejor bienestar animal no está exento de desafíos. Uno de los principales es encontrar el equilibrio entre el bienestar animal y la productividad económica. Aunque muchas prácticas de bienestar animal pueden mejorar la eficiencia a largo plazo, algunas pueden requerir inversiones significativas a corto plazo.

La adaptación al cambio climático es otro desafío importante. Los eventos climáticos extremos y los cambios en los patrones de temperatura y precipitación pueden tener impactos significativos en el bienestar animal. Será necesario desarrollar estrategias de manejo y sistemas de producción que sean resilientes frente a estos cambios.

La educación del consumidor sobre el valor del bienestar animal es otro área que requerirá atención continua. Aunque la conciencia sobre el bienestar animal está aumentando, todavía hay mucho trabajo por hacer para que los consumidores comprendan plenamente las implicaciones de sus elecciones de compra en el bienestar de los animales de granja.

A pesar de estos desafíos, el futuro del bienestar animal en la ganadería también presenta numerosas oportunidades.

Conclusión

El bienestar animal en la ganadería moderna se ha convertido en un imperativo ético, económico y social. A medida que avanzamos, es evidente que las prácticas que priorizan el bienestar de los animales no solo son moralmente correctas, sino que también conducen a una producción más sostenible y de mayor calidad.

Las nuevas normativas, junto con los avances en salud animal, prevención de enfermedades y reducción del uso de antibióticos, están transformando el sector ganadero.

Sin embargo, este camino hacia una ganadería más ética y sostenible requiere un esfuerzo continuo y colaborativo entre ganaderos, veterinarios, investigadores, legisladores y consumidores.

El futuro de la ganadería dependerá de nuestra capacidad para equilibrar las demandas de producción con el compromiso inquebrantable de garantizar una vida digna y saludable para los animales de granja. Al hacerlo, no solo mejoraremos el bienestar animal, sino que también construiremos un sistema alimentario más resiliente y responsable para las generaciones futura.

¿Qué es el bienestar animal y por qué es importante en la ganadería moderna?

El bienestar animal se refiere a las condiciones físicas y mentales en las que viven los animales. La importancia del bienestar animal radica en su impacto directo en la calidad de vida de los animales, así como en la calidad de los productos de origen animal que se obtienen. Un ganadero que prioriza el bienestar de los animales no solo cumple con principios éticos, sino que también mejora la calidad de la carne y otros productos de origen animal, como el huevo o la leche.

¿Cuáles son los estándares de bienestar animal en la producción ganadera?

Los estándares de bienestar animal incluyen aspectos como el espacio suficiente, agua limpia, alimentación adecuada y atención veterinaria. Estos estándares son esenciales para garantizar que los animales en la producción ganadera vivan en condiciones que minimicen el estrés y promuevan su salud física y mental. La organización mundial de sanidad animal establece pautas que los ganaderos deben seguir para asegurar el bienestar del ganado.

¿Cómo afecta el bienestar animal a la calidad de los productos de origen animal?

El bienestar animal no solo es un tema ético, sino que también está directamente relacionado con la calidad de los productos. Los animales que viven en condiciones adecuadas tienden a ser más saludables y producir productos de origen animal de mayor calidad. Esto se debe a que el estrés y el sufrimiento pueden afectar negativamente su salud, lo que a su vez impacta la calidad de los productos finales.